Los Bosquimanos

Por Rafael Humberto Guerrero, columnista invitado

Son unos hombrecitos delgados, de piel cobriza, afables amistosos, excelentes caminantes y extraordinarios cazadores con dardos envenenados. Su hábitat natural son las arenas del Kalahari. Se popularizaron en el mundo occidental, por la serie de películas “Los dioses deben estar locos”

Los Bosquimanos, tienen además una “sui generis” estructura social. No tienen un jefe definido (una auténtica democracia) y están a la vanguardia en los procesos de participación, para la toma de decisiones. Poseen un “record mundial”, son el conglomerado social con menor grado de violencia e índice de criminalidad. Él primer peldaño de su sistema judicial, es la mediación de toda la tribu en los conflictos internos, entre individuos o familias.

Un famoso antropólogo convivió varios años con ellos y explica el procedimiento de intermediación. Por ejemplo: cuando dos miembros de la tribu tienen un conflicto entre ellos, sea cual fuese su causa, se reúnen todos los hombres con el propósito de dialogar, esclarecer y mediar un pleito. Primero recogen y entierran todas sus armas en el desierto, luego se inician los debates con participación comunitaria sobre el tema del conflicto. Esta etapa puede llevar varios días. Ellos no tienen prisa, pero si una gran perseverancia. En las noches dialogan bailan y practican un rito a sus dioses, para pedir sabiduría, luz y armonía

Si pasan los días y no llegan a un acuerdo o si uno de los litigantes no tiene voluntad de perdón y de convivencia o no accede a una reconciliación, por consenso lo envían a un exilio con su familia, para que reflexione y pueda regresar luego sin odios ni rencores. Así, luego de “moler y moler”, se consigue casi siempre un acuerdo y reconciliación entre las partes, se recupera la armonía y la rutina retorna a la tribu.

Como nos hace falta en todas los órdenes, la mediación organizada para resolver por la vía del dialogo nuestro conflicto armado y para estructurar una paz sustentable. También en litigios menores es bien valida la fórmula de los Bosquimanos. Toda una enseñanza de tolerancia, convivencia y vida.