Niños migrantes inician sus estudios en Norte de Santander

Gracias al apoyo de World Vision, en Norte de Santander, más de 200 niños y niñas migrantes en condición de vulnerabilidad, se han vinculado a los procesos de aceleración del aprendizaje y refuerzo escolar en instituciones educativas de la región.

Con el propósito de generar espacios de participación de los niños y adolescentes vinculados al proyecto ‘La Educación no puede esperar’, Education Cannot Wait junto a World Vision  fortalecen su compromiso por la niñez migrante, a través de estos proyectos que buscan mejorar la situación educativa de estos niños que no cuentan con los recursos necesarios para acceder a una educación de calidad.

Además, la falta de documentación tanto de los padres o cuidadores como de los mismos niños, dificulta el acceso a estos procesos de aprendizaje.

Necesidades que derivan de más de dos años sin estudio por la crisis migratoria o niñas y niños que no han tenido un primer acercamiento a un aula de clase. Principalmente se trata de estudiantes que interrumpieron su ciclo escolar entre 1 a 4 años, lo que generó un retraso considerable en el aprendizaje según su edad y del nivel de escolaridad que deberían tener.

Es por ello que el modelo de educación flexible trabajado por el proyecto, le permite al estudiante, durante un año, avanzar desde uno a tres o más grados escolares según el desarrollo de competencias y habilidades que logre alcanzar durante el periodo. Esto le brinda la oportunidad de ingresar el próximo año al grado correspondiente de acuerdo a su edad.