Gracias a los controles constantes que ejercen los uniformados adscritos a la estación de policía Ocaña en las salas de reflexión, se frustró una fuga de presos que se iba a llevar a cabo en el transcurso de la noche en dicha estación de Policía.
Los uniformados al realizar la verificación a las celdas donde se encuentran las personas retenidas, hallaron en uno de los baños un túnel que tenía un promedio de 40 centímetros de pared afectada, el cual conducía a una vivienda aledaña a las instalaciones policiales.
Esta excavación se estaba trabajando al parecer con dos varillas que fueron encontradas dentro de una de las celdas.